
España acabó el partido ganando 2 goles a cero y pensaréis,"más que suficiente, lo importante es ganar!"... Pero ese sería el pensamiento de alguien que no ha seguido ni a visto un partido de la roja, porque de España se espera más, mucho más.
Si analizamos un poco qué es lo que ha podido pasar, (todo esto lo hago sin dramatizar que ya sé que no es para tanto) se vislumbra una cierta tristeza en la selección: tanto del entrenador como de los jugadores. Es cierto que llegan en innumerables ocasiones pero hay que meterla, que si nos espera un rival como Brasil no hay que andar con tonterías...
Algo que tampoco ayuda son los comentarios de Luis Aragonés. Vale que ha ganado lo imposible con España y que conoce a nuestros jugadores como el que más, pero hay formas y formas de decir las cosas y ahora el que manda es Del Bosque y parece un niño chico criticando y ¡ojo! que no digo que no lleve razón en algunas cosas.
Y por último, a veces la prensa tampoco ayuda, les sube y les baja a la velocidad de una lanzadera, y el pesimismo tiene que irse ya del vestuario español. Porque vamos a ser primeros de grupo, porque vamos a ganar, porque tenemos un buen equipo y porque los españoles somos cabezones y cuando algo se nos mete en la cabeza...eso sí con realismo, que ni somos mejores o peores, que esto es un Mundial y todo está por decidir.
Todo puede pasar...